Durante su Asamblea General, Forest Stewardship Council (FSC) fue cuestionado por varios miembros quienes expresaron su razonamiento sobre aventurarse en un nuevo proceso de aprendizaje de ingeniería genética. La ingeniería genética es ahora inaceptable en los bosques y productos certificados por el FSC. Hasta ahora, sólo está permitida para fines de investigación fuera del ámbito de las operaciones certificadas.
En febrero, el FSC inició un proceso de aprendizaje de varios años sobre la ingeniería genética en la silvicultura fuera de las áreas certificadas por el FSC. Con este proceso de aprendizaje propuesto en dos fases, el FSC pretende que sus miembros adquieran conocimientos suficientes y fiables sobre los avances de la ingeniería genética en la silvicultura.
En la primera fase, un panel de expertos desarrollará un borrador de marco de participación que establecerá las condiciones para participar en el posterior proyecto de aprendizaje propuesto. El marco incluirá aprendizaje de investigación, experimentos de laboratorio y ensayos de campo con estrategias de confinamiento.
Respuesta tibia del pleno
La ingeniería genética se considera un tema controvertido entre la mayoría de los miembros del FSC. Durante una sesión paralela a la Asamblea General 2022 del FSC, varios miembros expresaron su preocupación cuando el FSC abra la puerta a las pruebas de campo de árboles modificados genéticamente.
"Debería haber un mayor enfoque en la intensificación de la silvicultura. Tenemos que estudiar más detenidamente cómo podemos obtener madera y otros servicios de los ecosistemas a partir de menos tierra; no necesitamos más productos que no se generen de forma natural", señaló un miembro de la Cámara Social que se unió virtualmente.
Los grupos ecologistas y otras ONGs también han advertido de que estas pruebas de campo podrían suponer graves riesgos para los bosques. Algunos temen que las iniciativas para contener los ensayos de campo puedan resultar contraproducentes y provocar la contaminación de los bosques por la ingeniería genética.
Por ejemplo, la primera plantación de eucaliptos transgénicos del mundo obtuvo luz verde en Brasil hace unos años, a pesar de las campañas masivas de los ecologistas. Si bien estas plantaciones crecen más rápido y, por tanto, son más atractivas desde el punto de vista comercial, las especies de árboles de crecimiento rápido agotarán aún más los nutrientes del suelo. Además, el eucalipto en concreto ya es conocido por su voraz consumo de agua.
Varias investigaciones han demostrado un aumento en el uso de agrotóxicos - ingredientes venenosos clave utilizados en la agricultura industrial - en los cultivos transgénicos. Las plantaciones transgénicas crearán más problemas, planteando graves amenazas para la salud tanto ecológica como humana.
¿Merece la pena el riesgo?
En su defensa, el FSC subrayó que este proceso no consiste en la fijación de normas para la revisión de la Política del FSC, sino que es un mero ejercicio de aprendizaje. "Es probable que la ingeniería genética en la silvicultura siga ocurriendo con o sin el FSC", explicó un representante del FSC.
Los miembros del panel se turnaron para explicar que existe cierto nivel de riesgo con estos experimentos y ensayos durante la sesión - y que esto es innegable. Los miembros parecen llegar al consenso de que si FSC no está dispuesto a a asumir estos riesgos, tendrá que alejarse por completo de este tema y no desempeñar ningún papel en el impulso de este proceso de ingeniería genética en el futuro.
